La vida es bella

La vida es bella

sábado, 6 de septiembre de 2008

Tu, mi cigarrillo

Fuiste mi amigo,
fuiste mi todo,
fuiste el confidente,
a quien le contaba todo.

En ti me refugiaba,
en ti me escondía,
en ti me calmaba,
en ti me perdía.

Saboreaba tu gusto,
disfrutaba tu aroma,
gozaba tenerte,
y aun más poseerte.

Contigo contaba,
de día y de noche,
a ti te contaba,
todo sin reproche.

Mis penurias,
mis dolores,
mis angustias,
mis amores.

Eras mi amiguito,
mi amiguito del alma,
eras mi amiguito,
con quien conseguía calma.

Pero tu veneno,
mataba mi alma,
era tu veneno,
quien me engañaba el alma.

Buscaba una salida,
o una solución falsa,
un vicio terrible,
que enfermaba mi alma.

No dabas claridad,
la serenidad turbada,
tu me hacías daño,
más de lo que yo esperaba.

Pero a ti te deje,
como se dejan los vicios,
los vicios que matan,
los vicios que engañan.

Tu mi cigarrillo,
el que me mataba en calma,
tu mi cigarrillo,
el que me asfixiaba el alma.

Te sustituí,
por un amigo fiel,
te sustituí,
por un gran querer.



© Espe

No hay comentarios: